lunes, 24 de diciembre de 2012

teatro escolar


Programa nacional de teatro escolar: las cien representaciones de la obra En la diestra de Dios padre

Por Jesús Chávez Marín

El 30 de abril de 2002 se presentó la función número 100 de la obra de Enrique Buenaventura En la diestra de Dios padre. En el texto del programa de mano viene impresa esta frase:El teatro es síntesis de las artes; plataforma del lenguaje, las ideas, la belleza, las emociones; y cruce del camino para los derroteros de la vida”.

El teatro es el acto y el reflejo de los veneros más profundos y exactos de la sociedad, del destino individual y colectivo de una época y un territorio bien definidos en las palabras y en las acciones de la escena.

También sabemos que la educación más trascendente sucede en la infancia, pues en esa edad de los hombres se aprenden con más claridad y para siempre los primeros conceptos del mundo, las experiencias que habrán de marcarnos con profundidad, para bien y para mal. Por eso resulta de tanta nobleza este Programa Nacional de Teatro Escolar con el que se cumple el propósito de ofrecer a los niños y jóvenes del sistema de educación pública de México la experiencia del arte escénico.

La Universidad Autónoma de Chihuahua participa en este programa con esta versión escénica de la obra En la diestra de Dios Padre, de Enrique Buenaventura, dirigida por el maestro Manuel Talavera, producida por el Instituto Nacional de Bellas Artes y el Instituto Mexicano del Seguro Social, y coordinada por el Instituto de Bellas Artes.

El día de hoy tenemos el gusto de asistir a la representación número cien, lo cual se dice fácil pero solo se realiza con el trabajo, la disciplina y el talento de un grupo de teatro que refrenda una vez más su permanencia y su buena calidad artística.

Los actores y los técnicos de esta obra forman parte de la comunidad de artistas que es el Instituto de Bellas Artes de la Universidad Autónoma de Chihuahua, donde además de este hay otros grupos de teatro, en los que participan dramaturgos, actores, escenógrafos, directores, tramoyistas, iluminadores, músicos, coreógrafos y bailarines.

En la puesta en escena que hoy llega a su centésima función, por lo cual se develará en este acto una placa conmemorativa, participaron, además del director Manuel Talavera, los actores Luis Heraclio Sierra, Raúl Valles, César Gómez, José Alfredo Reza, Paloma Castillo, Laura Terrazas, Alejandra Villa, Cynthia Fernández, Verónica Encinas, Alejandra Campos, Jennifer Calderón y Gloria Armendáriz. El vestuario lo realizó el maestro José Pérez Delgado. Las máscaras fueron confeccionadas por Gerardo Castañeda. La maestra Rosa María Sáenz estuvo a cargo del maquillaje además de ser la asistente de la dirección. El maestro Salvador Lomelí diseñó la escenografía, la cual fue realizada por Karla Arroyo, Adán Sáenz, Ever Sáenz y Gerardo Sierra. La música fue compuesta por Gustavo Flores. La iluminación la realizó Jaime Félix.

Tal como dice el plaquette citado al principio: el teatro es síntesis de las artes. Hacen falta muchos oficios para una buena puesta en escena, el trabajo coordinado de mucha gente durante meses de ensayos y de instalaciones, además de presentar cada función.

Por eso la gente llega a querer tanto a sus artistas, porque este tipo de realizaciones son una forma muy alta de educación y de esparcimiento.

Abril 2002

No hay comentarios:

Publicar un comentario