Foto Jessica Aguirre Porrras
Memoria es destino
Por Jesús Chávez Marín
En los vaivenes de la memoria
hubo un hombre que recordaste
como presagio de tierra fértil.
Los ojos del desconocido
registraron tu figura esbelta
cuando los tres meses del primer embarazo
hinchaban sutil tu vientre joven.
En el cristal de la mirada
la silueta “de tu fina y firme forma femenina”
–Neruda dixit–
quedó grabada con tinta
de amor, dolor, bienaventuranza.
Quien la miró salir de su casa,
una tarde fresca teñida en magia,
descubrió en la sombra de los ojos
el rumbo nítido de la vida.
Por eso hoy, en otro abril,
él escribe con manos abiertas
desde tu lecho, refugio mutuo.
Ayer, en una noche mítica,
cuerpo y mente navegaron
en los abrazos del amante;
en aguas serenadas
de ilusión, recuerdo, transcurso.
Y la fantasía de dos transfigurada.
Marzo 1994
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