Escribano X
Por Rafael Cárdenas Aldrete y Jesús Chávez Marín
Dibujo: Beatriz Bejarano
Ya no se mira en los espejos y no es por su físico, que no ofende. Es porque ya se conoce de sobra... y sabe de lo que es capaz. Sigue la huella de la poesía en celo sin perder tiempo aullándole a la luna. Esta es su historia. Es la luna, menguando de mansita, la que viene y le gime para meterse bajo su abrigo. Cuando amanece, orbita deslumbrado por el esplendor de otros cuerpos celestes. Es oficiante de la literatura, con fidelidad a las letras y a sus combinaciones para hacer palabras; escribe relatos de amor que alzan el vuelo, en parvada o en poemas, con sus iniciales en tu carne. A veces la gente fabula sobre él pensándolo como un lobo indómito, estepario, solitario por rabioso, capaz de hincarles los dientes, de morder la mano que lo alimenta y lo acaricia. Pero solo es otro Wolverine gruñéndole al mundo por justicia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario